La matriz energética de nuestro país depende en un 90 % de los hidrocarburos, principalmente gas que representa el 49%. Esta deformación en la matriz energética hace que estemos atados al abastecimiento casi exclusivo de estos recursos hidrocarburiferos, y ahora a los precios internacionales a partir de que perdimos el autoabastecimiento de gas a partir del año 2007. Esto hizo crisis el año pasado cuando perdimos el superávit comercial energético y la Argentina debió comprar distintos combustibles por 9300 millones de dólares. Lo que significó un déficit neto de 3000 millones de dólares para el año 2011. Para el año 2012 ese déficit va a trepar a los 5000 millones de dólares, en una escalada imparable con la política energética que venía aplicando el gobierno.
Esta situación se hizo insostenible para la economía de nuestro país. La presidenta Cristina Kirchner sostuvo en su mensaje por cadena nacional, que con estos valores “ la economía argentina se hacía inviable”. Esta es la razón primaria por la que el gobierno terminó expropiando el 51 % de las acciones de Repsol de la YPF S.A. No fue producto de un plan premeditado para afianzar un camino de autonomía, sino que la gravedad de la crisis energética obligo al gobierno a adoptar esta medida de ruptura con su aliado principal en el negocio petrolero.
LA EXPROPIACION DEL 51 % DE LAS ACCIONES DE REPSOL
La decisión del gobierno de expropiar el 51 % de las acciones de Repsol y pasar a controlar la nueva YPF S.A fue una medida positiva porque golpeó a uno de los monopolios petroleros que dominaban una parte importante de la actividad petrolera, aunque como dijimos en su momento, insuficiente.
Durante años, los que luchamos contra la privatización y luego por la recuperación de nuestro petróleo, planteamos sacarle a los españoles los recursos y la empresa YPF, que tiene una representación emblemática para nuestro pueblo y nuestro país, la YPF estatal creada por ese patriota llamado Enrique Mosconi. Y desde ya sacarle a todos los monopolios imperialistas este recurso estratégico que se han repartido.
También hicimos básicamente dos advertencias en la propuesta del gobierno que luego plasmó en el artículo 17 de la ley de expropiación. Una, que no debía formarse una nueva YPF como Sociedad Anónima sino como Sociedad del Estado con control de los trabajadores, técnicos y organizaciones populares, y la otra que no debía permitirse la asociación con monopolios privados, estatales o mixtos, sean extranjeros o nacionales. La nueva YPF debía recuperar la capacidad de decisión soberana.
Además, por eso dijimos que era insuficiente, debían revertirse todas las áreas en manos de monopolios imperialistas, que hoy siguen controlando el 70 % de la actividad petrolera y gasífera.
Es muy necesario tener en cuenta que la YPF actual representa solamente un 30% de la industria petrolera Argentina (producción y reservas). Tiene ahora mucha menor cantidad de gente especializada, menos equipamiento (equipos de perforación, oleoductos, unidades sismográficas, centro de procesamiento, flota de navíos, aviones, 2000 estaciones de servicio menos, etc.) y por supuesto sin la infraestructura social que tenía en los pueblos petroleros como hospitales, escuelas, caminos, proveedurías, etc.
Como ha reconocido el Gobierno en su “Informe Mosconi”, la YPF actual ha sido vaciada y endeudada. Como denunciamos en su momento desde nuestro Partido y en los movimientos en que participamos, Repsol estaba en retirada estratégica, utilizando las ganancias de Argentina para invertir y desarrollar sus negocios en otras zonas mucho más rentables. Con nuestro patrimonio hicieron grandes negocios en Libia, Argelia, Golfo de México, Indonesia, etc. Hay que decir que este “informe Mosconi” firmado por De Vido y Kicillof, que con toda claridad describe las maniobras y el accionar delictivo de Repsol, no exime al gobierno de su complicidad y responsabilidad con el vaciamiento de la empresa. Todos los balances, hasta el 8 de marzo de este año, fueron aprobados y firmados por Baratta, Subsecretario del Ministerio de Planificación Federal.
Pero el gobierno actúa con tanta impunidad para despegarse de su responsabilidad, que en la última asamblea de accionistas, el Estado nacional impuso su mayoría del 51% de los votos para desaprobar el balance de gestión empresarial aunque hizo una salvedad por el desempeño del entonces director estatal, Roberto Baratta, dado que consideró que actuó “correctamente”, a diferencia de los directores puestos por Repsol y la familia Eskenazi.
LA RUPTURA DEL GOBIERNO CON REPSOL
Muchos recordarán cuando el 11 de mayo del año pasado, conectados por teleconferencia entre Olivos y Loma de la Lata en Neuquén, Cristina tiraba flores a YPF SA. frente al propio Sebastián Esquenazi, De Vido y el gobernador Sapag,ella misma anunciaba un aumento de las reservas del 8% del total del país. Ocho meses después de ese anuncio, la Presidenta criticaba a algunas petroleras y comenzaba su ofensiva contra Repsol YPF. Reconocía el déficit en la balanza comercial energética del 2011.
Muchos recordarán cuando el 11 de mayo del año pasado, conectados por teleconferencia entre Olivos y Loma de la Lata en Neuquén, Cristina tiraba flores a YPF SA. frente al propio Sebastián Esquenazi, De Vido y el gobernador Sapag,ella misma anunciaba un aumento de las reservas del 8% del total del país. Ocho meses después de ese anuncio, la Presidenta criticaba a algunas petroleras y comenzaba su ofensiva contra Repsol YPF. Reconocía el déficit en la balanza comercial energética del 2011.
La pista la dio Dromi —ideólogo y ejecutor de las privatizaciones menemistas, y asesor de De Vido— cuando, a principio de diciembre de 2011, declaró en los medios que había que estatizar el petróleo. Había comenzado el operativo del gobierno para desplazar a Repsol y se rompía una alianza que arrancó con la llegada del propio Néstor kirchner en el 2003.
Es evidente que frente a la crisis en la política energética del gobierno, y a la sangría de divisas por las importaciones de combustibles, éste quiso cambiar los acuerdos pactados con la “argentinización” de Néstor Kirchner.
Ese acuerdo consistió en que Eskenazi con créditos de algunos bancos y de la propia Repsol compraba el 25% de las acciones, y a cambio se permitía a Repsol girar el 90 % de las utilidades entre los accionistas. Repsol no aceptó cambiar lo acordado y hacerse cargo de parte del costo de la importación de gas como pretendía el gobierno, así estalló un conflicto que rompió la alianza entre ambos.
Cuando el gobierno tomó la decisión de embestir contra Repsol para pasar a controlar la mayoría de la nueva YPF SA con mayoría estatal, lo hizo acordando con los yanquis y otros países imperialistas. Un dato clave fue la reunión de Cristina con Obama en Cartagena, en el marco de la cumbre del G20, el día anterior al anuncio de la medida.
Los yanquis aprobaron la medida sobre la base de frenarle el paso a los chinos que ya hicieron pie en Argentina con la asociación a Bridas y los ingleses en Pan Americam en la explotación de la cuenca del Golfo San Jorge, Chubut, donde está Cerro Dragón que es el yacimiento más importante de nuestro país, tanto en producción como en reservas.
Por otro lado, los yanquis son los principales productores de hidrocarburos no convencionales, tienen los equipos y la tecnología que pretenden vender al mundo.
En el mismo sentido rápidamente apoyaron los franceses que con su empresa TOTAL se ha transformado en el primer productor de gas en nuestro país con el 29 % de la producción total. Por eso se entienden las declaraciones que hizo Sarkozy, presidente de Francia en ese momento, justificando la decisión del gobierno argentino como una medida soberana de nuestro país, pero proponiendo que se pague un precio justo por el valor de las acciones a la Repsol.
Por eso no ha sido casualidad el nombramiento de Galuccio al frente de YPF. Un hombre de la empresa Schlumberger, que estaba al frente de la unidad de negocios de esa empresa en Inglaterra.
Schlumberger, con sede en Houston, es la empresa de servicios especiales más grande del mundo, de origen francés pero que hoy controlan los yanquis y opera en 85 países.
Esta misma empresa es la que ha trabajado para Repsol en los primeros pozos de shale oil o petróleo no convencional en la formación Vaca Muerta en la provincia de Neuquén.
En el gobierno y la propia YPF S.A se ha abierto una aguda lucha sobre las asociaciones que debería hacer la empresa.
Directivos de las empresas yanquis Exxon Mobil, Chevron, Conoco Philips y Apache han planteado al gobierno nacional que están dispuestos a asociarse pidiendo como condición una ley del Congreso Nacional que garantice las inversiones, que le permitan la exportación de petróleo y el giro de utilidades al exterior. Esto no ha sido mal visto por el presidente de YPF S.A.
Y hay otro tema que es el precio, porque los precios internos del barril y el gas no cubren las expectativas de las petroleras para invertir en la producción de los no convencionales realizada con fractura hidráulica que es mucho más costosa que la producción clásica o convencional.
Mientras tanto el gobierno abrió otras líneas de negociación. De Vido y otros funcionarios mantenían negociaciones con los petroleros chinos, También se abrieron conversaciones con la rusa Gazprom.
Mientras tanto el gobierno abrió otras líneas de negociación. De Vido y otros funcionarios mantenían negociaciones con los petroleros chinos, También se abrieron conversaciones con la rusa Gazprom.
Esta situación generó contradicciones, al punto que dos veces Galuccio amenazó con renunciar.
A su vez el gobierno trabaja febril y desordenadamente para atajar la crisis energética, para eso Moreno organizó el viaje con feria incluida a Angola, y Azerbaijan. Cristina viajó a Bolivia para discutir el precio de la importación de gas.
Se ha agudizado la lucha por un nuevo reparto del negocio petrolero en el país. Por ejemplo el gobernador Sapag de Neuquén, que resistió la expropiación de Repsol, ahora ha salido de gira en busca de capitales para que inviertan en shale oil y shale gas de la formación Vaca Muerta.
Tal es su vocación entreguista que exige igual que los monopolios elevar el precio del petróleo y gas en boca de pozo, e hizo presentar a los diputados de su partido,el MPN, un proyecto de ley en el Congreso Nacional para eximir de impuestos a los monopolios que inviertan en la producción de hidrocarburos no convencionales.
Tal es su vocación entreguista que exige igual que los monopolios elevar el precio del petróleo y gas en boca de pozo, e hizo presentar a los diputados de su partido,el MPN, un proyecto de ley en el Congreso Nacional para eximir de impuestos a los monopolios que inviertan en la producción de hidrocarburos no convencionales.
CAMBIOS IMPORTANTES EN EL NEGOCIO PETROLERO
Hay cambios importantes en el negocio petrolero en el último periodo.
Los chinos a través de su empresa estatal CNOOC ingresaron al mercado petrolero de nuestro país cuando compraron la mitad de las acciones de Bridas de la Pan Americam. Ahora venían por la mayoría de Pan American y ofrecían comprar la totalidad de las acciones de British Petroleum, pero a fin de octubre de 2011 se dio por terminada la negociación por la venta de sus activos en Pan American Energy (60% BP, 20% CNOOC,china y 20% Bulgheroni).
La British vendía para pagar parte del desastre ecológico por el derrame en Golfo de México. En la cancelación de esas negociaciones, tuvo que ver el Almirantazgo inglés que vetó la venta de BP, porque era contraria a su política para afianzarse el Atlántico Sur. Hoy siguen asociadas en Pan American, pero se reclaman mutuamente, British Petroleum y Bridas, con demandas judiciales por la cancelación de la venta.
A su vez, Bridas Energy (la Sociedad de Bridas con la empresa China) compró la refinería Esso de Campana con sus 460 estaciones de servicio, transformándose en una empresa integrada verticalmente que extrae, refina y comercializa.
El grupo de Cristóbal López compró Petrobras, la refinería de San Lorenzo con sus 160 estaciones de servicios, pasando también a tener una petrolera integrada.
Las empresas yanquis, Exxon Mobil, Chevron, Conoco Philips, y Apache abrieron negociaciones para asociarse a YPF S.A particularmente en la explotación de hidrocarburos no convencionales.
Pero el hecho más destacado es la ruptura de la alianza del gobierno con el monopolio español Repsol YPF, que culminó en la expropiación del 51 % de las acciones de Repsol, y también la ruptura con su socio Ezkenazi a quien el gobierno promovió e impuso en esa alianza con Repsol.
EL NUEVO ESCENARIO DE YPF S.A.
Aunque todavía la nueva conducción de YPF no ha presentado el plan de trabajo de final, si entregaron un anticipo en la Bolsa de valores de Bs As, a la que llamaron “ presentación sobre el avance del plan estratégico de YPF S.A”. Alli básicamente plantean revertir la tendencia de la caída de la producción de –6% para llevarla a +6% entre el 2012 y 2017. Esto significan 221 millones de barriles adicionales, es decir, casi la producción total de un año que son aproximadamente 226 millones de barriles.
La presentación propone para llevar adelante este plan una inversión de 3500 millones de dólares para este año 2012 y 7000 millones para cada año hasta el 2017. Lo que sumaría una inversión de 38500 millones de dólares, tanto para hidrocarburos convencionales como no convencionales.
Pero resulta que en la primera reunión de accionistas de YPF S.A del 17 de julio, presidida por Kicillof y Galuccio, se resolvió distribuir ganancias de 2011 por 300 millones de pesos, mientras que se reinvertirán 5489 millones de pesos. O sea 1219 millones de dólares al precio oficial. Como vemos muy lejos de los 3500 mill de dólares anunciados en el plan de Galuccio.
Pero resulta que en la primera reunión de accionistas de YPF S.A del 17 de julio, presidida por Kicillof y Galuccio, se resolvió distribuir ganancias de 2011 por 300 millones de pesos, mientras que se reinvertirán 5489 millones de pesos. O sea 1219 millones de dólares al precio oficial. Como vemos muy lejos de los 3500 mill de dólares anunciados en el plan de Galuccio.
Esto tiene muchísima importancia porque significa que ya arrancó mal el plan de recuperación de la producción.
La línea del gobierno como vemos, no es afianzar un camino de autonomía e independencia nacional. Una vez desplazados sus antiguos aliados toda su línea es buscar nuevas asociaciones, que no hacen más que profundizar la dependencia. Con una diferencia: antes actuaban por intermedio de los Ezkenazi y los otros grupos petroleros socios o testaferros, como Cristóbal López y Lázaro Báez. Ahora el gobierno tiene una herramienta de negociación mas importante que controla el 30 % de la actividad petrolera.
Pero que sea estatal no significa, en sí mismo, que esté al servicio del pueblo y nuestro país. Está en manos de un grupo que pretende desarrollarse subordinado a monopolios imperialistas. Para llevar adelante su objetivo el gobierno es totalmente pragmático. su alianza estratégica la trazó con China, donde va lo fundamental de nuestras exportaciones de soja, con Europa y con Brasil. Europa desbarrancó por la crisis y Brasil comienza a sentir la crisis, lo cual impacta de lleno en la producción automotriz y muchas economías regionales de nuestro país.
Por eso, si este gobierno -que no es proyanqui- tiene la necesidad de hacer concesiones a los yanquis en el petróleo seguramente las hará. Si tácticamente necesita hacerlo para afianzar a su grupo, lo hará. De la misma forma que aceptó imponer la ley antiterrorista en nuestro país.
Por eso, si este gobierno -que no es proyanqui- tiene la necesidad de hacer concesiones a los yanquis en el petróleo seguramente las hará. Si tácticamente necesita hacerlo para afianzar a su grupo, lo hará. De la misma forma que aceptó imponer la ley antiterrorista en nuestro país.
La expropiación de las acciones de Repsol, que tuvieron un altísimo impacto en las masas y en todos los sectores y clases sociales de nuestro país, reavivó el debate sobre si este gobierno representaba un modelo nacional y popular, si es representante de una burguesía nacional industrialista, o como afirmamos nosotros es parte de una burguesía intermediaria que crece y se desarrolla subordinándose al imperialismo.
La política de los K es coherente con su historia. Por eso trató de imponer el relato de que los problemas en materia energética arrancaron en 1998 cuando Repsol compró la totalidad de YPF. Así trata de despegarse de la intervención directa que tanto Néstor como Cristina tuvieron en la privatización menemista de YPF y la entrega del petróleo.
En el contexto actual, el impacto en nuestro país de la crisis internacional y 20 años de una política hidrocarburífera contraria al interés de nuestro pueblo y nuestro país han puesto al desnudo la esencia de la política del gobierno de Cristina Kirchner en materia energética y petrolera.
Una auténtica política de recuperación de soberanía energética implica una YPF 100 % estatal y revertir todas las áreas en manos de los monopolios imperialistas. Queremos y luchamos para que se estatice la operación de todas de las áreas. Sólo así podremos avanzar en la estatización de todos nuestros recursos, desde el subsuelo al surtidor, y en la creación de una verdadera empresa estatal y federal de hidrocarburos con control de sus trabajadores y técnicos.
Los trabajadores, en especial los petroleros están llamados a jugar un papel decisivo para que esta crisis energética se revierta, recuperando el petróleo y el gas para ponerlo al servicio del pueblo, para cuidar el medio ambiente y para que se avance en las condiciones de trabajo, y contra el régimen de superexplotación que hoy se padece.
Esta lucha es parte de la que tenemos que librar junto a todos los sectores populares en la tarea de la revolución nacional y social.
En materia de soberanía energética nos inspiramos en el pensamiento de los patriotas de Mayo “Ni amo viejo ni Amo nuevo”, y seguimos el ejemplo del Gral Mosconi, que fue capaz de enfrentar a los monopolios imperialistas construyendo la segunda gran empresa estatal del mundo después de la creada por Lenin en la Unión Soviética.
En materia de soberanía energética nos inspiramos en el pensamiento de los patriotas de Mayo “Ni amo viejo ni Amo nuevo”, y seguimos el ejemplo del Gral Mosconi, que fue capaz de enfrentar a los monopolios imperialistas construyendo la segunda gran empresa estatal del mundo después de la creada por Lenin en la Unión Soviética.